El psicopedagogo no es un psicólogo, ni tampoco es un pedagogo. Los psicólogos, psicopedagogos y pedagogos tenemos nuestras competencias bien diferenciadas, aunque cierto es que, a través de la especialización, podemos compartir algunas áreas de intervención.
Los psicopedagogos pueden trabajar en equipo junto a psicólogos, dentro de grupos multidisciplinarios o realizando interconsultas. Los psicopedagogos estamos más centrados en el aprendizaje, realizamos una “terapia del aprendizaje” y abordamos el desarrollo educativo de los niños, adolescentes y adultos.

Los psicopedagogos diagnosticamos e intervenimos, en cooperación con otros profesionales (fisioterapeutas, logopedas, terapeutas ocupacionales, psicólogos, psiquiatras, pediatras, auxiliares, maestros, etc.), sobre los diferentes problemas y trastornos del aprendizaje.

Las sesiones tienen una duración de 45 minutos.

Normalmente los encuentros son una vez por semana, pero dependiendo de cada caso, podría ser necesario realizar más sesiones.

Dependerá de cada caso. Algunas personas se benefician del abordaje a través de videollamada, pero para otros, debido a las características de sus dificultades o trastorno, es mejor el tratamiento presencial.
Se trata de una decisión que se debe tomar en conjunto entre la familia y el profesional.

Dependerá de cada persona y de sus dificultades. Algunos necesitan más apoyo y acompañamiento que otros.

No, atendemos a cualquier persona en situación de aprendizaje, desde un bebé hasta un anciano. ¡Aprendemos desde que nacemos hasta nuestros últimos días!

No, trabajamos con personas con y sin discapacidad.